RECOMENDACIONES PARA UNA VIDA SANA

1- Levantarse temprano y lavarse los dientes, beber un vaso con agua.

2- Inspiramos lento y profundo pensando en que llenamos nuestro cuerpo de energía cósmica, retener el aliento - unos segundos pensando que dicha energía quema todo lo malo de nuestro cuerpo - , y expiramos lentamente pensando que estamos expulsando toda esa energía negativa. Respiramos de esta manera por 15 minutos.

Meditación:

Sentarse cómodamente y con las palmas de las manos hacia arriba descansando sobre los muslos, respirar lentamente y asimismo pensar que todo el amor que fluye en el universo llena nuestro corazón, practicarlo durante 15 minutos luego del ejercicio respiratorio.



Luego de un tiempo empezara a notar los grandes beneficios que esto proporciona a nuestro cuerpo y espíritu.

Tratemos de no juzgar a los demás, y dejar que cada quien viva su vida, demos consejos cuando sea oportuno y cuando nos lo pidan.

Alimentación depurativa necesaria para curar el cuerpo y la mente:

Consumir 3 dientes de ajo en las mañanas con un vaso de agua, o en su defecto licuar una palta con unos 5 dientes de ajo y consumirlos.

Esto permite controlar la presión arterial y el colesterol, a su vez es un depurativo de la sangre, cuida nuestras arterias y retarda el envejecimiento del organismo.

Consumir cebollas rojas ya sea en ensaladas, salsas, de preferencia cruda, ya que ademas de limpiar nuestros pulmones, también es depurativo de la sangre.

La ingesta diaria de estos alimentos nos llevara a tener una vida sana y longeva.

Otros productos a consumir diariamente son las espinacas, Naranjas ( jugo y bagazo) ya que los flavonoides de estos reducen el colesterol de la sangre, avena, choclos y manzanas.

Alimentos y sustancias negativas para nuestro organismo
Evitar en lo posible tomar bebidas espirituosas, café, carnes rojas, cerdo ya que son las mas toxicas para el organismo, mantequillas y margarinas (grasas dañinas). Sal refinada, azúcar blanca, pan blanco y arroz blanco
Esta comunicación pretende incidir en la necesidad de que las personas con discapacidades del desarrollo lleven unos estilos de vida sanos, enfatizando en la educación física y en la educación de los hábitos alimenticios. En la actualidad se puede decir que tanto en los EE.UU. como en el resto del mundo faltan programas unificados e información al respecto. De los pocos programas que de hecho existen, aquellos que van dirigidos a personas institucionalizadas o a las que reciben educación en centros escolares, dan la sensación de estar inspirados individualmente y de tener poca uniformidad.

La importancia de llevar un estilo sano de vida quedó demostrada y matizada en varios estudios llevados a cabo en Alameda County, California (Belloc y Breslow, 1972; Breslow, 1972, 1977). En dichos estudios, tras seleccionar aleatoriamente a más de 6.000 habitantes, los autores realizaron un seguimiento durante cinco años. Según los resultados de dichos estudios, los siguientes hábitos inciden positivamente en la duración de la vida:

1. Desayunar todos los días.
2. Comer con moderación, sin "picar" entre comidas.
3. Mantener un peso corporal normal (equilibrado, en relación a la altura, complexión, edad, etc.).
4. No fumar nunca.
5. No beber alcohol, o hacerlo sólo moderadamente.
6. Hacer ejercicio con regularidad.
7. Dormir siete u ocho horas diarias.

Estas recomendaciones son importantes para todos nosotros, incluidas las personas con discapacidades del desarrollo. Sin embargo esta comunicación no pretende entrar en detalle en cada una de ellas, sino aconsejar que incorporemos estos buenos hábitos en los programas de salud existentes, y que fomentemos específicamente los referidos a una buena alimentación y al ejercicio físico.

Después de impartir durante 25 años un curso titulado: "Ejercicio físico, Control del peso y Alimentación" a universitarios de los primeros primeros años de la carrera, existen ciertas áreas básicas que se podrían incluir en los programas destinados a personas con discapacidad. En el área de la alimentación se debe hacer hincapié en una dieta sana. Pero debido a las variaciones metabólicas de unas personas a otras, es imposible precisar las necesidades alimenticias para cada persona. Según Jones, Shainberg y Byer (1993), y el Comité de Expertos sobre Nutrición y Necesidades Humanas (1993), una relación general de los alimentos que diariamente necesita un adulto medio, incluiría:

1. Dos o tres vasos de leche o de productos lácteos.
2. Dos filetes de 85 gramos de peso. (Es decir, 170 gramos de carne).
3. De tres a cinco cazos de verduras.
4. De dos a cuatro piezas de fruta (una de ellas alta en vitamina C).
5. De seis a once rebanadas (o cucharadas) de pan y cereales (fécula).
6. Pocas grasas y dulces.

Sin embargo, la realidad es que en los EE.UU., las personas tienen una dieta fuerte en lo que se denomina "Comida Basura". En 1993, el Comité de Expertos sobre Nutrición y Necesidades Humanas se reafirmó en su estudio de 1977 titulado, "Objetivos Dietéticos para los Estados Unidos". Los resultados de estos estudios recomiendan que reduzcamos la cantidad de grasas animales, el azúcar y la sal, y que incrementemos la cantidad de fibra y de hidratos de carbono complejos (cereales, frutas y verduras frescas). Estas recomendaciones son extensibles a la mayoría de las culturas y todo el mundo debería hacer suyos estos buenos hábitos alimenticios.

Como se ha mencionado anteriormente, he impartido un curso sobre "Ejercicio físico, Control del peso y Alimentación" en el Hastings College durante 25 años. En la Tabla 1 se incluye un resumen de su contenido que podría adaptarse para su uso general con la mayoría de las personas con discapacidades del desarrollo.